CONFESIONES :o, VIVENCIAS

Cosas personales: [Mi ilusionante normalidad], julio 2020.

Esta entrada será simple, sencilla. Pero es que estoy contenta conmigo misma. Me gusta mucho cuando, a pesar del paso de los años y a pesar de los cambios drásticos  en mi vida  —como la doble maternidad— sigo conservando cosas, rutinas, hábitos que son importantes para mí.

CARTAS:

Por ejemplo, en el último mes he escrito alrededor de 6 o 7 de mis cartas “especiales”, y aún tengo unas cuántas  más por hacer. Escribir cartas es una de las cosas que más me definen, desde que tengo uso de memoria. Claro que los tiempos han cambiado, y obviamente existen nuevas fórmulas de comunicación, pero me alegra tanto no haber perdido eso que tengo de las cartas. También me encanta recibirlas, claro, pero lástima que cada vez quedamos menos que las escriben.

FITNESS GIRL:

Por otra parte, también les cuento que he empezado a hacer ejercicio y a cuidarme estrictamente con la alimentación. Y pfff… ¡esto me hace sentir tan bien conmigo misma! Para mí, mi aspecto físico es importante. Cuando me cuido físicamente me siento que realmente estoy manteniendo un equilibrio entre mi espíritu, mi alma y mi cuerpo. [Bueno, la verdad es menos “espiritual”: simplemente me gusta verme y sentirme guapa.] Y como todas las cosas que tengo que hacer “para mí”, me toca hacerlo en la madrugada. Pero vaya si vale la pena…

LIBROS:

También me siento feliz de poder estar nadando entre mis libros. Soy una lectora simultánea: leo varios libros a la vez. Ahora mismo estoy leyendo tres o cuatro libros. Durante el día, voy tomando uno u otro y voy avanzando en la lectura. Sí, soy esa clase de lectora que no puede ser “fiel” sólo a un libro. Necesito más, y más, y más… Estoy a la espera de un muevo libro. Y ya tengo en mente cuál será el que compre el siguiente mes. Esto, tampoco lo puedo evitar.

BUSCAR A DIOS:

Los que ya me conocen desde hace un tiempo, saben lo importante que es Dios para mí, y que mi lugar preferido es su presencia, estar con Él, hablarle y escucharle. Y esto también lo estoy haciendo cada día, y amo hacerlo. De verdad. No hay nada mejor para mí. Todo lo demás puede esperar. Pero esto… ♥️

VIDEOS:

Como ya saben, hace unos meses empecé con un proyecto en mi canal de YouTube y demás redes sociales, en las que abordo temas de índole espiritual para mejorar la calidad de vida, literalmente. Con esto también estoy muy entusiasmada. Ahora mismo estoy en tiempo de preparación para una nueva serie de vídeos que saldrá en un par de semanas. Me resisto a entrar en el sistema de las RRSS, porque no quiero “habitar” allí, ni que sea allí donde encuentre mi alimento. Sólo aparezco por allí cuando tengo algo que ya se ha producido en mí y necesito compartirlo, y me ahorra, además, muchísimo tiempo. Lo aprovecho para todas estas cosas relevantes que he citado antes.


Bien, y para terminar esta entrada, sólo quiero rematar con algunos mensajes.

1. Bartomeu y Setién, ¡váyanse ya!🤨😠😡

2. Si quieres que te escriba una carta, dímelo y lo hago. Me hace muchísima ilusión escribir cartas.☺️✍🏻📜

3. En verano me toca usar el cabello ondulado. 🥵

4. Un par de días atrás tuve una de mis crisis existenciales y fue maravillosa.🙃😂

5. No estoy muy activa en las RRSS ahora mismo porque necesito estar conectada en mi corazón con Dios, leer, meditar, y eso requiere todo el tiempo y la concentración posibles. Pero me pueden escribir para lo que necesiten. En un par de semanas, cuando tenga lista la nueva Serie Devocional, nos volvemos a ver por las redes.

Siempre vuestra,

Lihem Ben Sayel…

 

 

CONFESIONES :o, MUY PERSONAL

Gracias.

Algunos lo intentan; pero otros, simplemente lo consiguen. Y de esta manera, quiero agradecer a ciertas personas que, de una u otra forma, han estado presentes en esta última y determinante temporada de mi vida, y han llegado a mi corazón genuinamente. Talvez su participación haya sido puntual, pero ha marcado la diferencia. No deja de maravillarme —y hasta corro el peligro de parecer repetitiva— la cantidad de cambios que he experimentado en estos últimos años. Algunas personas que habían sido importantes en mi vida, ahora ya no forman parte de la misma. Son más un recuerdo que otra cosa. En cambio otras, sin yo siquiera imaginarlo, irrumpieron con una fuerza imposible de obviar. Gracias. Mil gracias. Porque sea cual sea mi destino, ustedes han formado parte —aunque sea con un mensaje en el momento oportuno, o un abrazo sanador, o una palabra del cielo, o con ánimos sinceros— de uno de los viajes más relevantes del proceso que es la vida.

Gracias Ana.

Gracias Amarilis.

Gracias Dámaris.

Gracias Avgustina.

Gracias Desireé.

Gracias Nana.

Gracias José.

Ustedes, en algún momento de mi historia, se convirtieron en maná del cielo.

CONFESIONES :o

Cosas personales, abril 2019.

[Largo, largo suspiro…]

Digamos que solo tengo tiempo/ganas de escribir este post de esta manera. Así que, aquí voy:

Últimamente me he dado cuenta de que alguien revisa mis posts, mis blogs, casi que entrada por entrada. No tengo manera de saber quién es, aunque despertó mi curiosidad. Mientras no sea un plagio a mis escritos… está bien.

He leído muchos libros en el periodo de estos tres años, en los que me sumergí en una aventura sin igual: una búsqueda por tener mayor profundidad en mi relación con Dios y en vivir mi vida como una verdadera discípula de Jesús. Tuve que quitarme la etiqueta de «buena cristiana», y sencillamente empezar de cero. Nunca he sido tan auténtica como ahora, cuando mi fe se basa única y específicamente en mi intimidad con Dios y todo lo que esto conlleva (impregnarme de su esencia y adoptar sus cualidades mientras me despojo de todo el orgullo, la vanidad y el egoísmo que puedo albergar). Suena como si me estuviera convirtiendo en una monja o algo por el estilo. No. Simplemente me cansé de las apariencias, de los fingimientos, de las pretensiones. ¡Quiero vivir una fe auténtica! Y eso solo pasa por las palabras de Jesús: si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz y sígame. Sí, vale, estoy obsesionada. Felizmente obsesionada.

Encontré a una persona con la que puedo hablar sin parar. ¡Yo, hablar sin parar! No soy amante de usar la palabra «amiga», pero supongo que es eso. Aunque está tan apasionada por Dios como yo, y eso marca la diferencia. Somos dos apasionadas por Dios. Es una mujer de Dios tremenda, una profeta y además pastora. Es, después de mi esposo, posiblemente la persona que más esté pendiente de mí. La maternidad te aísla, esto es una realidad. Y donde muchas amigas han seguido con sus vidas, Dios puso en mi camino a esta mujer para estar a mi lado de una manera especial. Si me hubiesen dicho un par de años atrás que esta mujer sería mi amiga y vendría a mi casa, me habría reído a carcajadas. Y sí, nos reímos mucho cuando lo pensamos.

Por otra parte, llegó el tiempo de tomar decisiones. Decisiones crudas. Esas en las que intuyes y deseas que no haya vuelta atrás. Necesito romper con algo desgastado para comenzar algo nuevo, esperanzador. Les he hablado antes que estoy en busca de lo auténtico. Solo quiero lo auténtico. Y en estos últimos tres años me he dado cuenta que estoy mezclada con cosas que no lo son. Miro a mi alrededor y ya no me identifico con tales cosas. Tampoco con nadie. No quiero formar parte de ellas. No buscamos lo mismo. Es hora de partir  y salir en dirección a un nuevo destino vivo, auténtico y veraz. Eso pienso yo. Vamos a ver qué pasa. Donde hay esterilidad no puede nacer nada nuevo. Tampoco nada bueno. ¿Terminó un ciclo? Probablemente, sí.

Me compré el libro autobiográfico de Kim Walker-Smith, mi cantante favorita. Espero que no tarde mucho en llegar. Estoy tan ansiosa por leerlo que lo he comprado en inglés. Necesitaré el traductor para un par de palabras seguramente, pero valdrá el esfuerzo.

Ahora mismo estoy con dos libros, como siempre. Terminando uno, y comenzando otro. No he leído nada secular, aunque me ha apetecido e incluso he comprado algún libro. Pero bueno, esa es otra historia.

Y finalmente, he descubierto que no es que la familia sea lo más importante. Es que es lo más bonito.

—Lihem ben Sayel.

C237E21D-14C5-46BC-9F50-D7360659CF3F

 

 

CONFESIONES :o

Cosas personales [Noviembre, 2017]

Empiezo este reporte con una amable confesión: esta época del año es mi favorita, y la que más me entusiasma, sin duda. Sencillamente, logra envolverme con el clímax de la nostalgia; los pensamientos del final del año siempre se tiñen de introspección, y es fascinante.

Y haciendo gala de ese ejercicio introspectivo que inunda los últimos dos meses del año, escribo esta entrada, no con una sensación de triunfo absolutista, pero tampoco de derrota. Y continuando con las confesiones, debo decir que, una de las etiquetas con las que podría catalogar este año, es la de caótico. Desde el mes de febrero, una secuencia de circunstancias han marcado mi vida. Me han hecho distinta.

Y no, no es para nada negativo. De hecho, creo que he subido un peldaño en madurez como mujer (sea lo que sea que eso signifique), y, además, me he hallado más a mí misma en medio de la turba constante que son mis pensamientos y emociones, muy inclinadas a la nostalgia propia de los poetas y artistas.

Hablando con un gran amigo mío escritor,  me dijo que no estaba escribiendo mucho por el simple hecho de que «estaba feliz». Talvez a algunos de ustedes les suene exageradamente pesimista. No obstante, yo lo comprendí en seguida. [Qué maravilla ser comprendidos en la profundidad de nuestra aparente locura y caos.]

Algunas veces me he sentido cohibida en ser yo misma. Yo. La auténtica. La que tiene las emociones a flor de piel. La que es apasionada e intensa en lo que hace, dice y piensa. La que es sensible, y percibe la belleza de la vida,  del amor, del arte, de las cosas creadas y por crear por encima de los que me rodean. Esa. Esa que siente tener una locomotora en el pecho. Esa, impulsiva y salvaje, a veces. Esa que es capaz de permanecer inmóvil, de pie, aunque el mundo se le esté derrumbando encima. Esa que no se amilana. Esa que decide a quién seguir, a quién creer. Esa que cuestiona. Que no siente miedo [excepto por mi temor irracional a las alturas y a los murciélagos]. Esa a la que no le tiembla el pulso, ni desvía la mirada. Esa que es poesía y prosa, según la ocasión.

Así que decidí liberarme. [Quiero que esta frase esté aquí, solita, para que se vea y se entienda bien].

He comprendido algunas cosas más profundas acerca de mi fe. Acerca del Dios a quien amo y sirvo. He comprendido que a Él no lo puedes etiquetar en una idea, dogma, religión o filosofía. Que trasciende todo lo terrenal y humano. Y que, de esa misma forma, nos ha creado de una manera en la que, el único estado en el que nos sentimos cómodos, es siendo completamente libres. Libres de etiquetas y normas absurdas creadas por hombres para tener todo bajo control. 

Me está ayudando mucho un grupo de personas que encontré con mi misma fe, pero transgresores de la religiosidad; que hacen y dicen con enorme precisión muchas de las cosas que yo también pienso. Me alegra saber que hay personas como yo, sensibles al arte y la cultura, y apasionados por una fe verdadera.

No estoy hecha para obedecer un molde, para encajar. ¿Quién ha dicho que encajar es bueno…? Soy un espíritu libre, como dice una amada amiga. Siempre he tenido un toque desafiante bajo el velo introvertido de mi personalidad. Me gusta el misterio, y los secretos a descubrir.  Pero a mis 32 años, en vez de suponerme un problema, lo considero una enorme ventaja.

Amo a la gente, y quiero hacer el bien. Es mi meta en la vida: ser mejor persona para amar a las personas incondicionalmente. Y sólo Jesús me puede ayudar en esta tarea, porque Él lo logró.

Pero no me encasilles. No trates de hacer que encaje en un molde. Soy quien soy. Y si cambio, será para agradar al Dios en el que creo, no para que el sistema establecido se sienta cómodo conmigo. 

Por eso AMO  a la gente honesta. La gente honesta es humilde, porque es capaz de reconocer sus debilidades. Se hacen vulnerables al resto, y crecen en empatía, porque los demás pueden sentirse comprendidos y, por ende, aceptados.

Me siento desatada. Literalmente. Desatada de yugos mediocres y asustadizos. Y así como hiciere Sansón frente a los filisteos, en esta etapa de mi vida, derrumbo las columnas a las que me habían encadenado, para llegar a cumplir el propósito que está implícito en mí.

Qué maravilla es la LIBERTAD.

Nejath Lizett Hidalgo Mahmud (Lihem Ben Sayel)



 

 

 

 

 

CONFESIONES :o, MATERNIDAD, VIVENCIAS

Cosas personales, Oct. 2016 ( I parte)

Una de las cosas que más me llama la atención de mi embarazo, son las cosas que te dicen y la atención que llamas sobre la gente. 😀 Por ejemplo…

  • ¡Ya tienes cara de mamá! 14606330_10153896730958062_7124028046870764156_n

Esta frase me la dicen a menudo pero… ¡no la entiendo! ¿Qué quiere decir «exactamente» que tengo cara de mamá? Jaja… la verdad es que cuando me la dicen no sé si decir «gracias», o retirarme lentamente. Sé que es algo bueno eso de tener «cara de mamá». Pero no entiendo qué cara es esa.

  • Pero… ¿dónde está tu barriga? ¡No tienes nada!

14480503_10153874902598062_4683555351753177215_oEsta expresión es de las más comunes en mi embarazo. La verdad es que a mis 5 meses de gestación, aún no puedes distinguir si estoy embarazada, o simplemente acabé con el buffet Chino de la esquina la noche anterior. Cuando me dicen eso les digo cosas como «es que mi vientre era muy plano, así que normal que apenas se note». Y también les respondo: «sí, yo también me lo pregunto, pero estoy segura de que ahí hay «algo», porque lo vi, y además se mueve mucho«. 😀

  • No. Me. Toques. El. Vientre.

Creo que esta situación es algo a lo que las embarazadas nos enfrentamos ineludiblemente. Alguien se acerca, tú vas a saludarle, pero la persona agacha la mirada hacia tu vientre, hace algo así como un «ohhhhhh», levanta las dos manos, y las deja caer sobre tu vientre. Y te quedas así como «xpsksskdnkfl». Como medida de prevención, colgué una foto en el Facebook para comunicarle a la gente el hecho de que yo no me siento cómoda cuando no eres alguien de mi confianza, y me tocas el vientre. Mi «barriguita» no es un bien común 🙂 Otra estrategia es que, cuando alguien se me acerca, pongo mi mano en mi vientre, bloqueando el posible contacto.

  • ¿Qué tipo de madre seré?

Esta pregunta me la hago de vez en cuando. Hoy, un amigo muy amado me dijo que haygiphy dos tipos de madres: las que se aíslan y desaparecen, y las que se comen el mundo. Y me dijo que yo era de las segundas. ¡Me puse tan feliz…! Otra amiga me dijo ayer que el embarazo me ha dado vida, que me ve radiante y con mucha vitalidad. Son comentarios de gente que me importa, y me gusta escucharlos. Porque aislarte de todo (actividades, amistades, familia…) por un hijo, no es positivo. Yo sigo tocando la batería, y además con las nuevas INTOCABLES II, las baquetas que compré a mi bebé, (sí, no hay ningún riesgo, y a mi baby boy le gusta jeje), sigo predicando, sigo buscando a Dios como nunca, voy a natación para embarazadas desde que cumplí los 3 meses, hago mis minutos en bicicleta estática, y en fin… ¡que estoy llena de vida, de alegría, de gozo inefable, de fuerza, de energía!

  • El diario de mi Bebé

13582085_986685241428344_7786683721100536318_o

Ese «Paper Blanks» tan bello (y grande) que ven allí, es el diario donde escribo cada una de las experiencias de mi embarazo. Están dirigidas a mi bebé. Le cuento cosas, registro detalles, pego fotos, etc… El diario es tan grande, que creo que podré escribir allí hasta que mi hijo cumpla los 18 xD. Me encanta registrar todo acerca de esta hermosa etapa.

En fin… que creo que voy a ser una mami «molona» y que disfrutaré junto con mi amado esposo esta nueva experiencia que tenemos en común. Vivir la experiencia más grande de tu vida junto con tu mejor amigo, no tiene precio. Mi Habibi y yo somos un tremendo equipo, y sé que con la ayuda de Dios, de nuestra familia y amigos, lo haremos bien.


También quería agradecer a mi amigo Rafika por este hermoso detalle que me trajo desde la biblioteca de El Escorial, de Madrid. ¡Bellísimo!


Lihem Ben Sayel
the princess of the Lord…
CONFESIONES :o, MI VIDA EN IMÁGENES

Cosas personales, Sept. 2016 (I parte)

14124950_10153798866448062_6339423350014879969_oTodo es diferente. Incluso la rutina. Parece una incongruencia, pero en realidad no lo es. Después de mis vacaciones, (tiempo en el que me dediqué prácticamente a «no hacer nada»), las cosas siguen su curso con naturalidad, sí, pero ha habido cambios notables. Por ejemplo, desde que anuncié mi embarazo, ya no toco (oficialmente) la batería. Digo oficialmente porque en privado he tocado 😀 Luego de 11 años ininterrumpidos tocando, este es un cambio que noto, aunque en realidad no lo echo de menos jaja… ¡Estoy disfrutando tanto mi embarazo! Disfruto el simple hecho de estar tranquila y no preocuparme por ensayos, horarios, etc… Eso sí, la semana pasada le compré a mi bebé «sus primeras baquetas». Yo uso las VicFirth 5A, son mis favoritas. Las estrenamos él y yo, tocando en una preciosa batería acústica. Fue, como digo yo, su «bautismo de fuego». Fue la segunda vez que le sentí moverse tanto jaja… Yo creo que le gustó 😉 Estas baquetas serán las Intocables II (las primeras ya las rompí…) y se las grabaré con un pirógrafo con su nombre cuando conozcamos su sexo. ¡Me encantan estas cositas, desde ya tan nuestras!

Y bueno, hablando un poco de cosas del día a día, estoy muy feliz de que «al fin» me animé a hacer Baklawa (mi postre oriental favorito). Es laborioso y toma mucho tiempo, pero el resultado es exquisito. Me sentí realizada jaja… Ahora ya puedo ofrecer a mis comensales un menú árabe completo. Me imagino preparando este menú para mi esposo e hijos, y se me llena el corazón. Hay cosas que me gustaría que fueran traidición en mi familia, y esta es una de ellas.


img_6543

 

Esta foto que ven aquí, es una bandejita con dulces que me ha hecho una querida amiga marroquí, Maryam. Me la regala con motivo del embarazo. Son pequeños detalles que engrandecen a las personas y cultivan las relaciones. Los hace ella misma (y estos postres, si sabéis algo del tema, no son ni fáciles de hacer, ni baratos…). Shukran habibti Maryam 🙂

Y las siguientes imágenes, son fotografías enviadas por mi querida amiga Gisela, que disfruta sus vacaciones en la Gran Manzana. Y el lugar es nada más y nada menos que… ¡la Biblioteca Pública de NY! Dijo que se acordó de mí, y que no pudo resistirse a enviarme fotos. El lugar es impresionante, qué les puedo decir. Disfrútenlo tanto como yo. En el Milenio, me recorreré todos estos sitios jeje… Gracias mi Gise.

Y con estas fotos me despido. Este mes es MUY importante para mí, porque si Dios quiere, podremos conocer AL FIN el sexo de nuestro bebé. Un abrazo a todos.

Siempre vuestra,
Lihem Ben Sayel.

P.D.: he cambiado la dirección de mi Blog personal «Ania Amira Akhtar», ahora es eldiariodelihembensayel.wordpress.com. Sigue siendo el mismo Blog, sólo que cambié la dirección.


CONFESIONES :o, MI VIDA EN IMÁGENES, MUY PERSONAL, REFLEXIONES

-SIGUE INTENTÁNDOLO… :)

1508192_10152621027208062_8872222953488702307_n

«No lo sé, talvez debo seguirlo intentando».
Esto lo escribí en mi diario en 1.999, hace 16 años, (yo tenía 14). Me parecía imposible ingresar al grupo de danza de mi iglesia. Creía que talvez eso no era para mí. Sin embargo, era lo que MÁS deseaba en ese momento. Algo en mí me impulsaba. Sabía que en «mi código» estaba la danza, muy a pesar de que mi timidez me bloqueara y me hiciera bailar «tiesa» cuando lo hacía en público. Años, muchos años después, me doy cuenta de que ese «no sé, talvez debo seguirlo intentando» fue lo que marcó la diferencia. ¿Lo grandioso? Es que lo tomé como mi filosofía de vida…

-Nejath L. Hidalgo

1503297_10151812983048062_778551930_n